domingo, 31 de enero de 2010

LAS PENSIONES SON VIABLES

Recientemente hemos visto una avalancha liberal que tiene como objetivo alarmar a la población haciéndole creer que las pensiones no son viables. La Comisión Europea, el Banco de España, el BBVA y el Partido Popular Europeo (del cual el PP español forma parte) han publicado informes y documentos que alertan a la población española de que hay que reducir las pensiones porque el sistema de Seguridad Social que las financia no es sostenible. En defensa de sus posturas presentan datos e información empírica que asumen que apoyan sus alarmas sobre las cuales basan sus recomendaciones. Todos estos documentos tienen errores graves que invalidan sus conclusiones, transformando tales documentos en manifiestos políticos en lugar de informes científicos. Veamos tales errores.

1. Asumir que la esperanza de vida mide los años que una persona vive Tales documentos asumen erróneamente que el hecho de que la esperanza de vida promedio de España haya pasado de ser 76 años a 80 años en veinticinco años (1980-2005) quiere decir que el promedio español vive ahora cuatro años más. Ello no es cierto. Hay que saber qué quiere decir esperanza de vida y cómo se calcula. Supongamos que España tuviera sólo dos habitantes. Uno, Pepito, que muere al día siguiente de nacer, y el otro, la Sra. María que tiene 80 años. La esperanza de vida promedio de España sería 0 años más 80 años, dividido entre dos, es decir, cuarenta años. Pero supongamos que en un país imaginario vecino, hay también dos ciudadanos, uno, Juan, que en lugar de morir al día siguiente de nacer, como Pepito en España, vive veinte años, y la otra persona es la Sra. Victoria que tiene también 80 años como la Sra. María. En este país imaginario, la esperanza promedio de vida es de 20 más 80, dividido entre dos, es decir 50 años, diez años más que en España. Ello no quiere decir (como constantemente se malinterpreta este dato) que el ciudadano promedio de aquel país viva diez años más que en España: lo que el dato dice es que hay diez años de vida más en el promedio de aquel colectivo de dos personas sin clarificar que ello se deba a que la Sra. Victoria viva diez años más que la Sra. María (lo cual no es cierto), o que sea Juan el que vive veinte años más que Pepito. Todos los documentos que favorecen la reducción de las pensiones concluyen que la Sra. María vive diez años más, lo cual, repito, no es así.

Lo que ha estado ocurriendo en España (y en Europa) es que la mortalidad infantil ha ido disminuyendo de una manera muy marcada, con lo cual la esperanza de vida ha ido aumentando, pasando de 76 años a 80 años. Ello no quiere decir, como habitualmente se asume, que el ciudadano español medio viva cuatro años más ahora que hace veinticinco años. La mortalidad por cada grupo etario ha ido descendiendo (incluyendo entre los ancianos), pero los años de vida que el ciudadano medio vive ahora no es de cuatro años más que en 1980. Calcular las pensiones en base a esta lectura errónea de los datos penaliza a la población pues asume que la gente vive más años de lo que en realidad vive.

2. Los promedios no son sensibles a las diferencias por clases sociales Otro gran error es malinterpretar el significado de promedio Una persona se puede ahogar en un río que tiene como promedio sólo diez centímetros de profundidad. Tal río puede ir seco a lo largo de muchos kilómetros pero en algunas zonas éste puede tener tres metros de profundidad, y es ahí donde el lector se puede ahogar. Un promedio en sí no nos dice mucho si no sabemos también las variaciones del promedio. Lo dicho tiene especial importancia en el cálculo de la esperanza de vida y en la estimación de la longevidad (los años que una persona vive). Las diferencias en longevidad por clase social son enormes. Así, la diferencia en los años de vida existente entre una persona perteneciente a la decila de renta más baja del país (los más pobres) y la decila superior (los más ricos) en España es nada menos que de diez años (ha leído bien, diez años). En EE.UU. son quince y en el promedio de los países de la UE-15 son siete. Estas diferencias en longevidad se deben a que el nivel de salud de la población depende, sobre todo, de la clase social a la cual se pertenece. Un trabajador no cualificado (en paro frecuente durante más de cinco años) tiene, a los sesenta años, el nivel de salud que un banquero tiene a los setenta años. Este último sobrevivirá al primero diez años. Es profundamente injusto pedirle al primero que continúe trabajando dos (y algunos piden cinco) años más para pagar las pensiones del segundo que le sobrevivirá diez años. La insensibilidad hacia esta realidad mostrada por estos informes es abrumadora. Retrasar la edad de jubilación a toda la población trabajadora sin más, es una medida que perjudica a las clases populares para beneficiar a las clases de mayores rentas que viven más años.

3. El error del argumento alarmista: el crecimiento del porcentaje del PIB gastado en pensiones es excesivo Este es uno de los errores metodológicos más importantes y frecuentes que aparece en el informe de la Comisión Europea, y que ha sido reproducido en gran número de artículos y editoriales. Tal argumento indica que el porcentaje del PIB en pensiones subirá de un 8,4% en el año 2007 a un 15,1% del PIB en el año 2060, un porcentaje que estos informes señalan como excesivo, pues la sociedad en el año 2060 no podrá absorber tales gastos pues restarán recursos necesarios para otras actividades, programas o servicios a la población no pensionista. El hecho de que el porcentaje de gasto en pensiones públicas alcanzará el 15,1% en el 2060 se considera una noticia alarmante que requiere una intervención ya ahora, disminuyendo los beneficios de los pensionistas.

En este argumento se ignora el impacto del crecimiento de la productividad sobre el PIB del año 2060. Supongamos que el crecimiento anual de la productividad es un 1,5%, un crecimiento que incluso el Banco de España admite como razonable. En este caso, el valor del PIB español será 2,23 veces mayor que el PIB del año 2007. Ello quiere decir que si consideramos el valor del PIB del año 2007 como 100, el del año 2060 será de 223. Pues bien, el número de recursos para los no pensionistas en el año 2007 fue de 100 menos 8,4 (8,4 es la cantidad que nos gastamos aquel año en pensionistas), es decir, 91,6. En el año 2060 los recursos a los pensionistas serán el 15,1% de 223, es decir 33, y para los no pensionistas será 223 menos 33, es decir, 192, una cantidad que es más del doble de la existente en el año 2007, 91,6. Debido al crecimiento de la productividad, en el año 2060 habrá más recursos para los no pensionistas que hoy, y ello a pesar de que el porcentaje del PIB dedicado a pensiones es superior en el año 2060 que en el 2007. Los que alarman innecesariamente a la población olvidan un hecho muy elemental. Hace cincuenta años, España dedicaba a las pensiones sólo un 3% del PIB. Hoy es un 8%, más del doble que cincuenta años atrás. Y la sociedad tiene muchos más fondos para los no pensionistas de los que había entonces, aún cuando el porcentaje del PIB en pensiones sea mucho mayor ahora que entonces. Por cierto, ya hace cincuenta años, cuando España se gastaba un 3% del PIB en pensiones, había voces liberales que decían que en cincuenta años se doblaría o triplicaría tal porcentaje, arruinando el país. Pues bien, estamos cincuenta años más tarde, y el país tiene más recursos para los no pensionistas que existían entonces, aún cuando el porcentaje del PIB dedicado a pensiones se ha doblado.

4. Se equivocan constantemente en sus proyecciones demográficas Cualquier demógrafo que tenga un mínimo de rigor sabe las enormes dificultades en calcular cambios demográficos por periodos tan largos como cincuenta años. Y un buen ejemplo de ello es que los bancos y las cajas publican cada diez años informes anunciando el colapso de las pensiones en diez años. La Caixa (en 1998), el BBVA (en 2005 y en 2007), El Banco Santander (en 1992 y en 1999), el Banco de España (en 1995, en 1999, en 2002 y en 2009) y una larga lista, han predicho el colapso (utilizando un término menos contundente) de las pensiones para diez o al máximo veinte años más tarde. En defensa de sus proyecciones utilizan los mismos argumentos y los mismos datos (la Comisión Europea utiliza prácticamente los mismos datos que publicó el informe de la Fundación de las Cajas en 2007). Y una de las proyecciones más utilizadas es la de la evolución de la pirámide demográfica, indicando que el porcentaje de ancianos está creciendo muy rápidamente, y el de los jóvenes está bajando muy sustancialmente, ignorando que, en aquellos países que financian las pensiones a base de cotizaciones sociales como es el caso español, el punto clave no es el número de jóvenes y adultos por anciano, sino el número de cotizantes y la cantidad de cada cotización por beneficiario. Y tanto el uno como el otro están subiendo, el primero como consecuencia de la integración de la mujer al mercado de trabajo (si España tuviera la tasa de participación de la mujer en el mercado de trabajo que tiene Suecia, habría tres millones más de cotizantes a la seguridad social), y el segundo como consecuencia del aumento de la productividad y de los salarios. Es más, toda la evidencia muestra que las familias españolas desearían tener más hijos (dos por familia) que los que tienen ahora. El desarrollo de la sociedad y de los servicios de ayuda a las familias, como escuelas de infancia y servicios domiciliarios, permitiría el incremento de la fecundidad, una de las más bajas del mundo. Hoy en Europa, los países nórdicos, con un amplio desarrollo del estado del bienestar, tienen una fecundidad mucho mayor que en el Sur de Europa.

Dos últimas observaciones. El hecho de que el rigor y credibilidad de tales documentos liberales sea muy escaso no quiere decir que no tuviera que haber cambios en las pensiones, cambios distintos al retraso de la jubilación o disminución de sus beneficios que proponen los liberales. Contrariamente a lo que se dice constantemente, las pensiones, incluyendo las contributivas, son demasiado bajas, y ello como consecuencia de que los salarios son demasiado bajos (ver el excelente capítulo sobre las pensiones escrito por la profesora Camila Arza en el libro La Situación Social en España. Vol. III. Biblioteca Nueva. 2009).

Otro cambio que debiera ocurrir es la flexibilización de la edad de jubilación permitiendo que aquellas personas (la mayoría profesionales) que desearan jubilarse más tarde pudieran hacerlo. La jubilación debiera ser un derecho, no una obligación.

Debiera también prohibirse, como se ha hecho en varios países, la prejubilación utilizada por el mundo empresarial para realizar cambios en sus plantillas, penalizando el sistema de seguridad social y al prejubilado, pues éste recibe una pensión menor. Tal prejubilación le supone a España un recorte de ingresos equivalente a un 6% del PIB

Una última observación es que el Estado debiera aumentar su aportación a las pensiones tal como lo hacen otros países (como Dinamarca), en que las aportaciones procedentes de los impuestos generales son mucho más intensas que en España. No hay nada sagrado en la Biblia económica que diga que las pensiones tienen que pagarse a base de cotizaciones sociales. La popularidad de las pensiones (entre todos los grupos etarios) es tal que puede justificarse tal medida que contaría con gran apoyo popular. España ya lo hizo con la sanidad (que estuvo financiada por la Seguridad Social) y puede expandirlo a otras áreas.

Vicenç Navarro

jueves, 21 de enero de 2010

Sin regulación ni financiación...Movilización por Correos


El proceso de liberalización postal al que Correos tendrá que hacer frente en enero de 2011 sigue su curso en un contexto de recesión económica y en un claro marco de abandono del operador postal por parte del Gobierno que ejerce su responsabilidad con Europa y desatiende las postales en el ámbito nacional.

El Gobierno, siguiendo la estela de abandono hacia Correos de la segunda mitad de la anterior legislatura, en los dos últimos años ha recortado tanto la inversión productiva (en más de un 43 %, de 236 mill. de € en 2008 a 140 mill. de € en 2010) como la financiación del SPU (de los exiguos 90 mill. de € de 2007 y 2008, a unos ridículos 75 mill. € de los ejercicios 2009 y 2010, CUANDO EL COSTE DEL SPU CALCULADO PARA 2007 FUE DE MÁS DE 242 MILLONES DE EUROS y previsiblemente será superior en los ejercicios 2008, 2009 y 2010).

De no reconducirse entrará en tal situación de asfixia económica que la única vía que encuentre a no mucho tardar sea "la vía muerta". De ahí nuestra exigencia de reorientar la política económica del Gobierno respecto al Correo Público, dotándolo de la musculatura financiera suficiente para garantizar su viabilidad en el actual escenario. En definitiva, CCOO RECLAMA FINANCIACIÓN SUFICIENTE (para inversiones y SPU) y la REGULACIÓN NECESARIA (moratoria de Directiva y Ley Postal actualizada) CON EL FIN DE EVITAR QUE CORREOS ENTRE EN UN FASE DE INVIABILIDAD Y PÉRDIDA MASIVA DE EMPLEO. Es en este contexto en el que impulsamos nuestra CAMPAÑA DE MOVILIZACIÓN Y SENSIBILIZACIÓN LABORAL Y SOCIAL y, en su marco, presentamos nuestra PROPUESTA PARA UNA TRANSPOSICIÓN DE LA DIRECTIVA ADAPTADA AL CASO SINGULAR DEL CORREO ESPAÑOL, con la voluntad de propiciar un consenso inaplazable en torno al futuro de Correos.

Propuestas de CCOO

Ante la crisis, moratoria de la TerceraDirectiva, para garantizar el futuro del servicio postal público. Lo único que establece con claridad es la eliminación de la zona reservada -hoy hasta 50 gramos- lo que cuestionará todavía más, sin medidas alternativas, su capacidad para asumir el coste de prestación del servicio postal universal. En su defecto, transposición consensuada, sin necesidad de una nueva Ley Postal, con los siguientes contenidos:

Designación por Ley de Correos como prestador del Servicio Postal Universal para, al menos, los próximos 15 años. Adecuación de los mecanismos de financiación al contexto económico para garantizar la estabilidad del servicio postal público:

- 450 millones de euros para financiar el coste del Servicio Postal Universal para el periodo 2007-2009.

- 800 millones de euros para el periodo 2010-2012.

- 1.200 millones de euros para un nuevo Plan de inversiones a cuatro años (manteniendo el ritmo inversor de períodos anteriores).

Regulación de la competencia, estableciendo barreras a la entrada de otros operadores postales, exigiendo condiciones equivalentes a las exigidas al operador público.

Comisión Nacional del Sector Postal como regulador garantista, independiente y
consensuado por todos los agentes del sector

Situar a Correos como operador de referencia.

Definir un Plan estratégico para Correos que integre mecanismos de diversificación, internacionalización, I+D+i, así como el impulso a una banca postal propia consolidada.

Garantías para el empleo, a través de un Acuerdo marco de condiciones laborales mínimas para todas las empresas del sector y del Convenio y Acuerdo para los 67.000 trabajadores de Correos

miércoles, 20 de enero de 2010

CCOO aboga por el reingreso del trabajador en la empresa en caso de despido improcedente

19-01-2010. El secretario de Acción Sindical de CCOO, Ramón Górriz, ha defendido el "derecho de reingreso" del trabajador en la empresa después de que un juez declare improcedente el despido. Górriz rechazó además la situación que se produce desde que se puso en marcha el "despido exprés", que permite al empresario extinguir la relación laboral con el trabajador sin reconocer causa alguna a cambio del pago de una indemnización, ahorrándose procesos de mediación y los salarios de tramitación.


Ramón Górriz, secretario de Acción Sindical de CCOO
El secretario de Acción Sindical de CCOO en declaraciones realizadas en Rioja, donde participó en unas Jornadas sobre Planes de Igualdad, insistió también en el conocido como "contrato alemán", que permitiría "sustituir la cultura del despido por la del mantenimiento del empleo". A su juicio, "no hay que reducir el empleo, se puede reducir el tiempo de trabajo y garantizar la relación laboral".

martes, 19 de enero de 2010

Inminente convocatoria concurso permanente de traslados


El 18 de enero ha tenido lugar la segunda reunión de la Comisión Permanente de Traslados, para continuar con las negociaciones de las bases. La empresa ha seguido incidiendo en la necesidad de contabilizar cualquier tiempo prestado, independientemente de que haya sido desempeñado de forma provisional o definitiva.

CCOO volviendo a reiterar lo expuesto en la anterior reunión, ha manifestado:

No aceptaremos modificación del número de adjudicaciones del Concurso Permanente de Traslados.

No aceptaremos la valoración del desempeño provisional de un puesto base, por ser un sistema arbitrario, no avalado por proceso negocial alguno.

Aún aceptando la filosofía del impulso de la formación, y de su valoración para acceder a todos los puestos de trabajo, consideramos que su instauración tiene que ser fruto de un proceso de debate y negociación. Por lo que optamos a que su discusión se realice dentro del marco de negociación del III Convenio Colectivo y del Acuerdo Funcionarial.

Creemos que se deberían introducir mejoras como adecuación de la puntuación de rurales al resto del colectivo, solicitudes de jornadas parciales por puestos, mejoras del programa informático para que no se produzcan tantos errores como en la edición anterior…

Las reuniones no pueden demorarse en el tiempo, puesto que ya llevamos suficiente retraso y debería existir un compromiso para que se hicieran las gestiones oportunas y que la primera adjudicación se produjera en el mes de marzo.

Ante las diferencias existentes entre empresa y organizaciones sindicales, se ha aceptado la propuesta de mantener las bases tal y como estaban en la anterior edición, y posponer la discusión, a fin de no alargar el proceso. Una vez aceptado, la convocatoria se producirá entre el día 19 y 20 de enero, y el plazo de presentación de solicitudes queda establecido desde el 25 de enero hasta el 12 de febrero (ambos inclusive).

Se habilitará el código del puesto de trabajo de agente/clasificación 2 a tiempo parcial, para todo aquella persona que quiera solicitarlo de forma voluntaria, con el compromiso de que si se procediera a su cobertura con anterioridad, nos justificarían, tal y como recoge nuestra regulación, su necesidad de cobertura, evitando de esta forma que pudiera ser utilizado para reconvertir empleo estructural a tiempo completo en empleo a tiempo parcial.

domingo, 17 de enero de 2010

SITUACIÓN POSTAL INSOSTENIBLE, MOVILIZACIÓN NECESARIA E INEVITABLE


Comienza el nuevo año y el Gobierno (Ministerio de Fomento y Economía) sigue en las mismas respecto a Correos. No es nuevo, es el calco de la política postal que viene repitiéndose desde mitad de la legislatura anterior. Por una parte, la de severísimo recorte presupuestario y abandono político de Correos, que navega a la deriva sobre los peores números de su historia; por otra, la de total ausencia de diálogo social sobre el modelo postal de este país, incumpliendo así lo comprometido por el Ministro de Fomento en su comparecencia en el Congreso (“La nueva Ley asegurará también la solidez financiera de Correos … En este sentido, quiero anunciar aquí la disposición de mi departamento a mantener un permanente diálogo social con todos los agentes implicados en el sector postal y, muy particularmente, con los representantes de los trabajadores”). Ambos compromisos –fortalecer Correos y dialogar- son clamorosamente falsos.

En los dos últimos años, el Gobierno ha recortado la inversión productiva, en más de un 43% (de 236 mill. de € en 2008 a 140 mill. de € en 2010) y ha rebajado la financiación del Servicio Postal Universal (SPU) de los exiguos 90 mill. de € de 2007 y 2008 a unos ridículos 75 mill. de € en los ejercicios 2009 y 2010 cuando el mismo Ministerio reconoce que el coste del Servicio Postal Universal SPU calculado para 2007 fue de un montante superior a 242 mill. de € y que será superior para los ejercicios 2008, 2009 y 2010. Primera conclusión: el Gobierno pretende saldar su “deuda” con la sociedad -de 1.000 mill. de € en cuatro años- con un apaño de unos 300 mill. de €. Segunda conclusión derivada de la anterior: el recorte lo pagarán los ciudadanos con el aumento de las tarifas postales y la pérdida de calidad de servicio e, igualmente, los trabajadores con reducción de derechos (sólo hay que ver las propuestas de la empresa para el nuevo Acuerdo Funcionarial y Convenio) y más “apretones” en la gestión (que los responsables de la empresa se ven obligados a explicar por los centros ante la falta clamorosa de recursos).

Como si oyera llover, el Gobierno (Ministerios) se deleita en su pasividad. La falta de respuesta y la indefinición de un modelo postal de futuro da la impresión de estar hecha tan a propósito que la ausencia de modelo fuese el modelo mismo. La crisis no puede servir para justificar la pasividad de quienes tienen la obligación de tomar decisiones ni para avalar que, cuando las toman, lo hagan sin una visión integral, de forma fragmentada y a espaldas de los representantes de los trabajadores, como ha ocurrido con el “Decretazo” de acceso a la red pública, la aprobación del Reglamento de la Comisión Nacional del Sector Postal y otras, contradiciendo las propias palabras del Ministro de Fomento expresadas en el Parlamento.
Si no se corrige un rumbo que parece no querer corregirse de ningún modo, las consecuencias de esta situación pueden ser nefastas. Y va a ser difícil no apuntar como causante de tamaño desaguisado a quien, careciendo de propuestas postales y sin reformar la Ley Postal actual ni elaborar otra nueva, sí ha tomado decisiones que han permitido la potenciación del sector postal privado y la pérdida de cuota de mercado por parte del operador público; a quien, con un recorte presupuestario inadmisible, está propiciando el debilitamiento de un operador que se ve presionado para cerrar oficinas y puntos de atención al ciudadano, e imposibilitado de ejecutar inversiones para su modernización; a quien, colocando a Correos en vía muerta, está dibujando un panorama a medio plazo de pérdida de miles de empleos; y a quien, predicando el diálogo social y haciendo lo contrario, QUIERE APELAR A LA RESPONSABILIDAD SINDICAL CONFUNDIÉNDOLA CON EL SILENCIO.

CCOO afirma que SÍ hay modelo postal y que nosotros tenemos propuestas para ello. No se podrá alegar desconocimiento. Las hemos remitido al Ministerio de Fomento, a Grupos Parlamentarios, a diversas Instituciones, a la Empresa y las conocen los trabajadores y trabajadoras de Correos. Nuestras propuestas se resumen, con detalle, en un Pacto de Estado por el Correo Público que aborde, con decisión y en un escenario más que cercano de liberalización del mercado postal, la apuesta por Correos como operador público de referencia para la prestación del Servicio Postal Universal –con financiación pública suficiente- e incorpore al sector postal en el cambio de modelo productivo necesario para afrontar una salida a la actual crisis económica en el marco de un modelo de competencia reglado que favorezca la inversión productiva y el incremento de la calidad de los servicios postales como elemento dinamizador de la economía y del propio mercado postal.

A mitad de legislatura y con la que “está cayendo”, con una falta total de iniciativa que está hipotecando el futuro de la empresa, es obvio que a los trabajadores se nos está llamando a gritos a iniciar un proceso de movilización y sensibilización durante el primer semestre de 2010. Después de meses intentando buscar un consenso que el Gobierno ignora, CCOO recoge el guante. A partir de febrero, CCOO iniciará un proceso de movilizaciones que recorrerá, con concentraciones, manifestaciones y paros en una primera fase, el primer semestre de 2010 y que, de no rectificar el Gobierno en su actitud, culminará en una huelga general en el sector.
Para ello, poniendo “la mayor” por delante, CCOO se esforzará para, pese a la enorme distancia existente entre las diferentes opciones sindicales, sin sectarismos y potenciando lo que nos une frente a los que nos diferencia, construir la unidad de acción sindical posible y necesaria que pueda responder a lo que ya es más que una manifiesta agresión.

Nos parece bien construir Europa,
pero no sobre las ruinas de Correos

miércoles, 13 de enero de 2010

Correos remite el borrador de las bases del Concurso Permanente de Traslados ante la exigencia de CCOO


Correos ha cedido ante la demanda de CCOO entregando a las organizaciones sindicales el borrador de las bases del Concurso Permanente de Traslados y convoca una próxima reunión para el lunes 18 de enero.



Desde CCOO volvemos a reiterar que no aceptaremos la convocatoria con unas bases que supongan la reducción de derechos y, por tanto, volvemos a manifestar:

Que no estamos de acuerdo en la valoración del desempeño de puestos de forma provisional para trasladarse a un puesto definitivo.

Que, aún creyendo que hay que dar un impulso a la formación, no consideramos que tenga que hacerse sin negociación previa y mucho menos que pueda provocar el retraso en la convocatoria. La formación tiene que ser analizada globalmente para todos los procesos y para todos los puestos.

Que no aceptaremos reducción de adjudicaciones.

Esperamos que la próxima reunión del 18 de Enero pueda ser la que marque la convocatoria del concurso Permanente de Traslados para que no se produzcan más demoras.

sábado, 9 de enero de 2010

El Gobierno parchea y no resuelve la financiación pública de Correos


Para CCOO, el incremento de las tarifas postales por encima del 6% evidencia las medidas paliativas y cortoplacistas que está llevando a cabo el Gobierno evitando el desarrollo de un debate integral sobre el modelo de financiación


La subida de tarifas acordada por el Gobierno, es una decisión coyuntural y tacticista que pone en evidencia lo insostenible de la actual situación en la que el Gobierno, renunciando a buscar una solución integral, quiere ir saliendo del trance, de forma desordenada, con medidas paliativas. Esa renuncia -y la crisis no puede ser una excusa- a abordar un modelo de financiación "sostenible" en el tiempo, le lleva a utilizar la tarifa -6 puntos por encima del IPC-como parche para salvar el "apretón" que sufren unas cuentas, las de Correos, cuyas previsiones de déficit (-151 mill. de € para 2010) nos devuelven a preocupantes situaciones de incertidumbre propias de la década de los 90.

Preocupantes porque abren una lógica que parecía superada hace años en la mayor empresa pública del país que es la de situar a Correos en la órbita de las empresas deficitarias, que, visto el recorte financiero actual y la nula reacción del Ministerio -y estamos a mitad de legislatura-, resulta difícil pensar que no se hagan conscientemente.

Para CCOO no es de recibo que se pretenda utilizar la subida de tarifas como medida de "ajuste" para tratar de evitar que el déficit siga disparándose en una decisión que pretende poco más que "salvar los muebles" de una casa en la que ya se están abriendo demasiadas goteras.

Por supuesto que CCOO comparte la necesidad de armonizar las tarifas con el conjunto de la Unión Europea -más cuando las nuestras se encuentran entre las más bajas de todas- pero eso debe hacerse desde la búsqueda de una armonización integral y, no sólo, y no empezando por las tarifas (medida que siempre aplauden los privados porque levante la barrera de entrada en el mercado postal). En lo postal, como en otras cosas, Europa es asimétrica, y las soluciones armonizadoras han de tener en cuenta la singularidad del Sector Postal español. Así, a diferencia de otros operadores, Correos no dispone de monopolio en el correo local desde los años 60; otros gobiernos europeos protegen a sus Correos con inversiones, reforzando su posición o blindando los mercados postales con barreras de entrada a otros operadores, mientras aquí se sigue mirando al tendido en tanto operan miles de empresas esperando que se active el Decretazo de acceso a la Red que el Gobierno le sirvió en bandeja hace dos años.


La gravedad de la situación económica, también para Correos, obliga a acometer el debate de precios y tarifas de un modo integral y no parcelado como se viene haciendo los últimos años. No tiene sentido hablar de tarifas sin plantear la insuficiente financiación del Servicio Postal Universal (exiguos 75 mill.€ para 2010 frente al coste neto que se calculó para 2007 de más de 242 mill. de € y que será mayor en los próximos años), el recorte en un 43 % en inversiones de capital, el déficit de explotación, la ausencia de un Plan Estratégico de Empresa y, sobre todo, la apertura de un debate en torno a la transposición, y cómo, de la Directiva Postal Europea adaptándola a la singularidad del Correo español.

El aumento de las tarifas postales planteado como ajuste provocado por el recorte presupuestario/financiero- en una clara muestra de filosofía paliativa- convierte finalmente al ciudadano, depositario a su vez del derecho a la prestación de un correo público eficaz y eficiente, en pagano, vía tasas indirectas, de aquello que el Gobierno se niega a sufragar vía presupuesto para que, a través de éste, revierta en bien público para el conjunto de la sociedad.

CCOO, en el marco de nuestra propuesta de "Pacto de Estado por el Correo Público", que ya hemos dado a conocer a Gobierno, Empresa, Grupos Parlamentarios y trabajadores seguirá insistiendo en la necesidad de, al calor de la Ley de Economía Sostenible, reorientar la política económica del Gobierno en el ámbito postal con el fin de, lejos de medidas coyunturales, de "pan para hoy y hambre para mañana", se acometa un plan de financiación suficiente que despeje las incertidumbres que, en relación a su viabilidad económica, se ciernen ahora mismo sobre Correos.

El Gobierno debería perfilar, de una vez por todas, la política tarifaria en el marco de un debate integral sobre el modelo de financiación.

jueves, 7 de enero de 2010

las mentiras del Capitalismo: Algunos mitos y realidades sobre lo Público y lo privado


1º Mito capitalista: Los costes salariales y la estabilidad en el empleo restan “competitividad” a las empresas.

Realidad: Los países “competitivos” han sido durante décadas aquellos que han generado estabilidad en el empleo, cualificación profesional, sindicados fuertes, convenios colectivos y participación de los trabajadores en las decisiones de la empresa.

¿O Francia y Alemania no han sido durante décadas economías “competitivas”, según lo entiende el mercado? ¡Ojo, con asumir el concepto de competitividad! Para el capital significa: más productividad, menos empleados, menos costes laborales.


2º Mito capitalista: Las empresas privadas funcionan mejor que las empresas públicas.

Realidad: Muchas empresas privadas quiebran todos los días, en tiempos de crisis, y también en tiempos de bonanza, destruyendo empleo.

La empresa Air Comet del Presidente de la Patronal CEOE, Díaz Ferrán es un buen ejemplo: ocho meses sin pagar las nóminas, incapacidad para afrontar la deuda, vuelos cancelados, pasajeros desatendidos, concurso de acreedores y Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afecta a 640 trabajadores. ¿El Presidente de la Patronal puede asegurar que lo privado funciona mejor?


3º Mito capitalista: Hay que privatizar las empresas públicas para lograr una mayor “eficiencia” económica.

Realidad: No se privatiza por razones de eficiencia económica sino por los intereses económicos de una minoría que quiere crecer a costa del patrimonio de la mayoría.

Se han vendido empresas públicas bien gestionadas que han perdido “eficiencia” con la privatización. Buen ejemplo de ello es la privatización de ENDESA que, vía despidos o prejubilaciones a cargo de las arcas públicas, sustituyó al personal fijo cualificado que conocía y mantenía la red, por subcontratas (algunas del empresario Florentino Pérez) con personal temporal y menos cualificado para ahorrar costes y aumentar beneficios. Resultado: los apagones de varios días en los que tuvo que intervenir el Estado, con el envío de soldados, para poder restablecer el servicio eléctrico.


4º Mito capitalista: Los funcionarios no trabajan.

Realidad: Todo se puede y se debe mejorar, pero si realmente los trabajadores públicos no trabajaran, este país sería un caos monumental.

La Seguridad Social, el INEM, los centros públicos de Educación Infantil y Primaria, los centros de secundaria (ESO, bachillerato, Formación Profesional), las Universidades, los centros de salud, los hospitales públicos, Hacienda, la Policía, la Aduana, los Ayuntamientos, las Concejalías de las Comunidades Autónomas, el transporte urbano de titularidad pública, las Delegaciones de Gobierno, las oficinas de Correos, los Registros públicos y otros, atienden, todos los días, a millones de personas a lo largo y ancho de la España peninsular e insular.


5º Mito capitalista: Todos los españoles quieren ser funcionarios. (No quieren trabajar).

Realidad: Las personas necesitan empleo estable porque tienen que comer y vivir todos los días, pagar con regularidad la hipoteca o el alquiler.

Si el sector privado ofrece, cada vez, menos empleo de calidad, más precariedad, más temporalidad, horarios abusivos, bajos salarios, menos derechos laborales, más despidos, es normal que las personas, para cubrir sus necesidades vitales, aspiren, cada vez más, a estar en el sector público que ofrece más estabilidad, mejores condiciones salariales, más derechos laborales, más respeto a las categorías profesionales, más derechos sindicales.


6º Mito capitalista: Los trabajadores españoles quieren una sociedad “subsidiada”, el papá estado.

Realidad: Las trabajadoras y trabajadores españoles queremos un Estado Social de Derecho. El capitalismo, al contrario, quiere menos Estado y más mercado.

El capitalismo quiere menos rentabilidad social para la mayoría y más rentabilidad económica para los bolsillos de una minoría privilegiada. Con su doble moral, no dudan en vaciar las arcas del Estado solicitando subvenciones para la cuota empresarial a la Seguridad Social, beneficiándose de importantes bonificaciones fiscales, cobrando cuantiosos fondos públicos estatales o europeos o ayudas estatales como las que han ido a las manos de los bancos para reflotar al sector financiero privado que venía obteniendo beneficios multimillonarios. ¡Todo para el capital! ¡Nunca ganan bastante dinero!


7º Mito capitalista: Las empresas públicas no son productivas. Sólo generan burocracia.

Realidad: El sector público europeo ha tenido, durante décadas, importantes empresas productivas cuyos beneficios revertían en las arcas del Estado y se redistribuían en salarios indirectos, desarrollando un modelo de sanidad, educación y otros servicios públicos.

El sector público europeo constaba de compañías eléctricas, compañías de telefonía, banca pública, explotaciones mineras, compañías petrolíferas, compañías aéreas, compañías navieras, hasta fábricas de coches como la RENAULT cuyos beneficios nutrieron las arcas del Estado francés durante más de 40 años. Ahora el 80% de los beneficios entra en los bolsillos de una minoría económica. Este sector industrial y financiero fue público desde los años 40 (expansión del comunismo en Europa, con su ola de nacionalización de empresas) hasta los años 90 (expansión del neoliberalismo en Europa, con su ola de privatizaciones). ¿Cómo se atreven a decir que el Estado y los/as trabajadores/as públicos/as no pueden gestionar empresas productivas?


8º Mito capitalista: El objetivo de las empresas es crear empleo y riqueza en su país.

Realidad: El objetivo de las empresas privadas es ganar dinero, creando o destruyendo empleo, según convengan a sus cuentas de resultados.

Para incrementar sus ganancias, tampoco dudan en trasladar sus fábricas, cultivos, empresas a otros países menos desarrollados, en busca de mano de obra barata y sin derechos laborales a la que explotan sin ninguna consideración. ¿Por qué hablan de empleo, si quieren decir beneficios?


9º Mito capitalista: Los trabajadores “privilegiados”, con empleo y buenos sueldos, no deberían plantear reivindicaciones, en estos momentos, en los que otros trabajadores están en paro.

Realidad: Lo que no se dice es que se pretende abusar, también de los “privilegiados” que, todavía, tienen empleo y salarios decentes.

Negándose a las sustituciones, aumentando los horarios de los turnos de trabajo, cargándose los convenios colectivos. Buscan que se callen ante los abusos, confrontando a los trabajadores con empleo con los trabajadores en paro, cuando ha sido el capitalismo el que ha generado la crisis y el paro y no está por la distribución de la riqueza.


Resumiendo: ¿Para qué necesitamos la clase trabajadora a un sector privado que nos despide, no es capaz de generar empleo, se nutre, para funcionar, de las arcas públicas y pretende quitarnos los servicios públicos que todavía nos quedan para aumentar su cuenta de resultados? ¿Y a las fuerzas políticas que lo defiende?

A pesar de la propaganda machacona que nos lo quiere hacer creer, la economía de mercado, esto es el capitalismo, no es el único sistema posible. La economía, en la sociedad humana, es el intercambio con el medio natural y social para la subsistencia humana. Hay elección de medios, en función de los fines que se persigan. Los fines de una minoría, a saber un sistema privado. Los fines de la mayoría, a saber un sistema público.

Las y los trabajadores podemos, y debemos, reforzar las ideas fundamentales que dieron solidez al movimiento obrero, con las consiguientes conquistas sociales, para desarrollar un sector público productivo que nos permita ir construyendo un modelo económico alternativo para la mayoría.

María Puig Barrios, Secretaria del PC de Canarias / 02 ene 10

El sindicalismo europeo reclama a la Presidencia española de la UE que dé prioridad a la recuperación económica y el empleo


La Confederación Europea de Sindicatos (CES) ha remitido, al presidente del Gobierno, un amplio memorándum con las propuestas del sindicalismo europeo para el próximo semestre, en el que destacan, también, la lucha contra el cambio climático y el modelo social europeo.

De acuerdo con las centrales sindicales españolas -CCOO y UGT- la Confederación Europea de Sindicatos (CES) ha remitido al presidente del Gobierno de España un amplio Memorándum en el que se analiza la situación económica, social y política de la Unión Europea, en el contexto de la crisis económica mundial, y se formulan las propuestas sindicales para el semestre de la Presidencia española que acaba de iniciarse.

Las cuatro prioridades principales que señala el documento son:

a) Dirigir a Europa en medio de la crisis económica, financiera y social para lograr la recuperación del crecimiento económico y del empleo.

b) La agenda del cambio climático, a pesar del fracaso de la Cumbre de Copenhague, para que la construcción de una economía europea verde y la "transición justa" hacia ella sean pilares del cambio de modelo productivo.

c) Garantizar una transición efectiva entre el Tratado de Niza y el Tratado de Lisboa, desarrollando los valores que en este último caracterizan a la "economía social de mercado".

d) Hacer que la libertad de circulación de empresas y trabajadores no sea utilizada para erosionar el Derecho Laboral europeo, la negociación colectiva y los derechos sindicales -puerta abierta por recientes sentencias del tribunal de Justicia Europeo-, para lo que se propone la adopción de un Protocolo de Progreso Social, adjunto al Tratado de Lisboa, y la revisión de la Directiva sobre el desplazamiento de trabajadores.

En relación la política para superar la crisis, la CES considera que debe reforzarse la dimensión europea de las políticas económicas, y llama la atención sobre lo sumamente erróneo que sería retirar las medidas públicas de estímulo de la demanda antes de que la recuperación sea una realidad sólida, lo que sólo puede calibrarse a partir del momento en que comience a crearse empleo de nuevo.

Para crear más y mejores empleos el sindicalismo europeo propone un Plan de inversiones europeas por un total anual del 1% del PIB durante los próximos tres años, en particular en tecnologías nuevas, ecológicas y sostenibles y en los servicios públicos fundamentales.

La nueva regulación de los mercados financieros deberá ser una prioridad de la Presidencia española. En este capítulo se proponen, entre otras, las siguientes medidas:

- establecimiento de un impuesto sobre las transacciones financieras,

- un paquete de acciones para acabar con los paraísos fiscales, evitar la evasión de impuestos y restaurar la justicia fiscal entre capital y trabajo, entre ricos y pobres,.

- preparar una Directiva integral sobre fiscalidad del ahorro, e

- impulsar una nueva propuesta por parte de la Comisión Europea para aprobar una Directiva que establezca una base común consolidada para los impuestos a las empresas.

Entre las diversas propuestas sociales y laborales que contiene el Memorándum de la CES, destacamos, además de las ya mencionadas para evitar el dumping salarial y laboral a través de la movilidad transfronteriza, las relativas a subcontratación, salud y seguridad en el trabajo y negociaciones colectivas transnacionales. Se pide que se promueva la instauración de un instrumento europeo que regule la responsabilidad conjunta y solidaria de las empresas y los intermediarios, al menos en lo que se refiere al pago de impuestos, las cotizaciones a la seguridad social y los salarios.

En lo que toca a la salud y la seguridad en el trabajo, que sigue siendo una de las principales preocupaciones sindicales, además de la evaluación del vigente Programa de Acción europeo, se pide a la Presidencia española que impulse dos normas legislativas sobre las que se ha progresado muy poco, las relativas a trastornos musculoesqueléticos y exposición a sustancias cancerígenas, mutágenas y tóxicas para la reproducción.

Sobre negociación colectiva transnacional, la CES opina que hay que ir más allá de la iniciativa de la Comisión, sobre la creación de un Grupo de Expertos y la organización de un sistema de vigilancia, y plantearse las cuestiones relativas a su estatuto jurídico y procedimientos para su puesta en marcha.

Otras iniciativas legislativas en las que los sindicatos europeos están interesados son las relativas a la conciliación de la vida laboral, personal y familiar -transformación en directiva del acuerdo de los interlocutores sociales europeos sobre permiso parental, y desbloqueo e impulso a la revisión de la Directiva sobre mujeres embarazadas actualmente en trámite legislativo.

La visión de la CES sobre la política de migraciones es que la UE debería adoptar un enfoque integral que tuviera su correspondiente base legislativa. Considera urgente que se aborde, de una vez, la Directiva que regule los derechos de los inmigrantes de terceros países y que esta regulación se base en el principio de igualdad de trato.

Dentro del amplio capítulo del Memorándum dedicado a energía y cambio climático destacan las siguientes propuestas:

- elaboración de un Libro Blanco sobre cambio climático, capacidades laborales y empleo, que sirviera de base para las negociaciones sobre una "transición justa" a una economía verde,

- creación de un Fondo europeo de ajuste del empleo en el camino hacia una economía baja en emisiones de carbono, y,

- promover la adopción de una política energética europea.

El capítulo de iniciativas legislativas se cierra con la exigencia de que el Estatuto para la Sociedad Privada Europea, que regulará el funcionamiento de las PYMES, incluya con claridad el los derechos de participación de los trabajadores. La CES rechaza la propuesta formulada por la Presidencia sueca y apoya la posición aprobada por abrumadora mayoría del Parlamento Europeo el pasado mes de marzo.

Finalmente, sobre relaciones exteriores y comercio el Memorándum defiende la necesidad de que los Derechos Fundamentales del Trabajo, definidos por la OIT, y el trabajo decente formen parte de las negociaciones y los acuerdos comerciales en los que intervenga la UE (Ronda de Doha o acuerdos regionales o subregionales). Además, se opone a las negociaciones comerciales bilaterales. En el caso de las mantenidas entre la UE y Colombia se añade la denuncia por los asesinatos de sindicalistas -más de 50 en 2009- y otras violaciones de los derechos humanos básicos y la impunidad de estos crímenes.

También se solicita la inclusión de asesores laborales y de empleo en las principales representaciones de la UE en el mundo, en la nueva configuración de su Servicio Exterior.

Las secretarías de internacional de UGT y CCOO terminan esta declaración conjunta afirmando que apoyarán todas las iniciativas y actividades programadas por la CES para conseguir el mayor número posible de los objetivos propuestos en el Memorandum Así mismo informan que ambas centrales participarán en los diálogos y negociaciones que se desarrollarán durante la misma, dentro de la delegación de la Confederación Europea de Sindicatos. CC OO y UGT organizarán diversas actividades sindicales en las que participarán representantes de los sindicatos europeos y de otras regiones del mundo. Entre estas actividades previstas destacan la Conferencia sobre "Estrategia Europea 2020 y cambio de modelo productivo", las cumbres sindicales UE-América Latina y Caribe y de la Unión por el Mediterráneo y la Conferencia sobre cooperación sindical internacional de la Confederación Sindical Internacional (CSI).

miércoles, 6 de enero de 2010